Relato de una soñadora sin sueños
La habitual nitidez con que con que ella solía vislumbrar lo que debía hacer, recientemente estaba siendo eclipsada por una enorme aglomeración de pensamientos y sensaciones que nada tenían que ver con la realidad, pero que día a día iban haciendo mella en su interior, sin que siquiera lo notara. Había llegado a un punto en el que se encontraba detenida en el tiempo preguntándose qué camino debía tomar, pero nadie podía darle esa respuesta sino su propio corazón. Pero ella tenía miedo y estaba paralizada. Miedo de sentir, miedo de amar, miedo de luchar, en pocas palabras miedo de vivir. A lo largo de su vida había conocido diferentes personas que la habían amado mucho, y ella algunas veces, también los amó. Pero de un tiempo a esta parte su corazón se había ido cerrando poco a poco sin que ella se percatara, hasta llegar al punto en que ya era demasiado tarde, se había sellado por completo convirtiéndose en un ser humano frío y sin sueños. Pero el destino es imp...