¿Culpable o Inocente?

 ¿Puedes mantener una conversación con otra persona por más de media hora sin mirar el celular?

La realidad es que me es muy difícil si tengo el celular cerca. Alguna notificación me distrae, me genera la imperiosa necesidad de saber qué hay detrás de la pantalla... Y si por ahí se me ocurre la genial idea de dejarlo en silencio o desactivar las notificaciones, mi subconsciente toma el control e igual hace que lo coja de cuando en vez (el muy traidor).

¿Y dónde queda la necesidad de saber qué hay detrás de ese rostro que tienes delante de ti? ¿Por qué preferimos mirar una pantalla en lugar de conectar con otro ser humano presente? ¿En qué momento nos volvimos adictos? ¿Cuándo nos dejó de importar el contacto y lo sustituimos por lo irreal de las redes sociales?

Y luego nos quejamos  de que nos sentimos vacíos porque no somos conscientes de lo que tenemos delante. Somos las decisiones que tomamos.

Me declaro totalmente culpable, ¿Qué hay de ti?





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